Cristina Mateos ‘PEKE’ ha participado esta semana en el Torneo del Circuito nacional ‘Junior Cup’ celebrado en las instalaciones del club Valencia Tennis Center. Ha caído en el primer partido tras un extraño encuentro en el que incomprensiblemente se le han marchado hasta cinco bolas de partido, tres de ellas consecutivas.
Redacción.-
Cristina Mateos ha participado esta semana en el Torneo nacional celebrado en Valencia, dentro del Circuito ‘Junior Cup’ que patrocinan, entre otros, el diario MARCA y la marca de tenis Wilson. El Torneo se ha celebrado en las pistas del club Valencia Tennis Center. La PEKE ha tenido muy mala suerte, cayendo en el primer partido tras perder innumerables oportunidades para amarrar la victoria. Le quedará en el recuerdo con el tiempo como una de las anécdotas de peor suerte.
Hoy miércoles se enfrentaba a la madrileña Laura Tapiador. Aunque empezó con un 0-2 abajo, de inmediato llegó la reacción de Cristina y se lanzó con seis juegos seguidos para anotarse la victoria en el primer set con un 6-2. El segundo set lo encarriló bien con un 2-0 arriba (un parcial de ocho juegos seguidos ganados). Se anotó uno la madrileña (2-1), y la PEKE volvió a poner ventaja de por medio hasta alcanzar un 5-1. Le faltaba un único juego para ganar el partido, estaba hecho. Incluso alcanzó un 40-0, con tres bolas consecutivas de set y partido. Se le escaparon las tres, y perdió el juego y la oportunidad de ganar el partido. Tras el 5-2 se atascó y le pesó mucho esas tres ventajas seguidas para partido. Fue perdiendo los juegos hasta un 5-5, nerviosa y sin saber qué estaba ocurriendo, a la vez que la madrileña cogía aire. Corta la racha la PEKE y se pone 6-5, pero pierde en blanco el siguiente juego y se llega a un 6-6 que obliga a desempatar en un tie-break. El desempate avanza igualado hasta que logra un 5-4 favorable. Tras dar a una bola con el canto (5-5), se pone 6-5 y por tanto bola de set y partido; la cuarta bola de partido. La falla y se alcanza un 6-6. Gana el punto y con un 7-6 de nuevo tiene bola de partido (la quinta ocasión). La pierde también (7-7). Ahora es Laura la que tiene ventaja (7-8) y gana la bola y el segundo set (7-9) en el tie-break.
Tras tener cinco bolas de partido, queda obligada a jugar un desempate rápido a super tie-break. Salvo el 1-1 inicial, siempre fue abajo en el desempate, incapaz de superar el shock mental de lo que había ocurrido en ese segundo set. Llegó a estar 4-7 abajo, pero apretó el marcador a un 6-8. Perdió definitivamente 6-10. Uno de los partidos perdido más extraño e incomprensible de su trayectoria, tras disponer de hasta cinco bolas de partido, y tres de ellas de forma consecutiva. Con el tiempo quedará en una anécdota de mala suerte.